"Entramos a tomar unas sidras, y de paso nos animamos a picar unas croquetas. Antes de pedir, pregunté por los ingredientes, ya que soy alérgica a varios alimentos. Solo necesitaba saber si en algun momento se había usado Maizena, a lo que no fueron capaces de contestarme. El camarero me contestó muy amablemente, todo hay que decirlo, y con mucha sinceridad, diciéndome que la cocinera estaba de vacaciones y que la que había en ese momento no creía que fuese capaz de contestar a una pregunta tan complicada, y me ofreció la carta por si quería comer otra cosa. Lo primero, en los tiempos que corren en los que cada día hay más alergias e intolerancias, se deberían preocupar más en tener personal cualificado en la cocina, porque considero que no hice una pregunta tan difícil (harina de trigo o de maíz? . Mucha gente padecemos alergias graves, así que creo q es fundamental estar muy bien formado para este trabajo, y saber en todo momento lo que se ofrece a los clientes. Por otro lado, si no me saben decir qué llevan las croquetas....cómo me voy a atrever a comer cualquier otra cosa de la carta? Desde luego, no me atrevo a comer en un sitio en el que no me aseguren qué lleva exactamente cada plato, porque puedo acabar en el hospital. Con las mismas nos marchamos a cenar a otro lado."
Tous les prix sont des estimations.