"Soy un ser pagano, Dios no me lleva de la mano. Aunque el diablo siempre me acompaña, en esquivar el hambre tengo maña. Servidor es la gula personificada, por medalla llevo gran papada. En Bocados Burgers hago mi aparición, barriga dispuesta para un atracón. Su carta es muy original, no sonreír es delito penal. Yo, que de Dios he sido alejado, me pido una “Oh Pecador” porque me siento identificado. Es una doble smash burger con queso cheddar y bacon crujiente, mejor que la muerdas mientras está caliente. Por su salsa bacon-mayo yo me desmayo. La disfruté como un apóstol convertido, la religión burger a mi vida da sentido. Mi acompañante pidió una “La tentación” al punto, por los dedos de los pies me la unto. Pan de brioche y queso de cabra para que te la acabes en un abrakadabra. La cebolla caramelizada y la confitura de tomate me resbalaban raudas por el gaznate. Me gustó más la “Oh Pecador”, por la smash burger siento predilección. Moniatos y patatas yo recomiendo jalar, en mis venas el colesterol siento bajar. El dueño fue terriblemente amable, sin saber que trataba con un ser deleznable. Además el local pintado de negro es muy moderno, te sientes bien si eres feo y vienes del Averno. Aquí un pecador comió encantado, soy el gourmet culto y lo he recomendado."
