"Hemos vuelto con la familia después de repetir varias veces. Esta vez el primero para compartir ha sido muy escaso y poco variado. Los segundos nada sorprendentes, la paella rica pero un punto salada y también justa para dos, el bacalao una ración ridícula y muy de hospital , los postres cero creativos ni elaborados, de menú diario de 12 '50€. El servicio poco preparado, camareras lentas y poco profesionales ni atentas. Poco concentradas para tomar comandas, pedimos una botella de cava y nos la dejan tal cual encima de la mesa, pedimos una cubitera y como si hablásemos en japonés, al final nos trajeron un enfriador como el que guardamos en el congelador de cada, en fin, para un menú de 28 '50€... tienen muchísimo que mejorar, a nosotros nos costará repetir."