"Amabilidad extrema, nos acogieron fuera de horario con un bocadillo de pan, hecho por ellos, tomate y jamón serrano, bebida y café... Lugar impresionante, un trozo de muros de la ciudad, más una torre de vigìa, del siglo XIII, incorporado en la casa, y mesas de verano en la calle que da vistas increíbles sobre montes y valles a 180°. A la esquina del centro histórico. Agradecidísimos por la acogida y poder conocer lugar y cultura... Volveremos!"